Por Andrés China
Hacer
deporte, ya sea de manera intensa o más suave, lleva al organismo a mantener un
equilibrio muy inestable entre la energía que gasta y los nutrientes que
recibe. Si no hay una dieta equilibrada para reponer las fuerzas perdidas
durante la actividad física, es fácil que se produzca una descompensación.
Por
ello, es imprescindible una dieta correcta en cuanto a cantidad y calidad,
tanto antes como después del ejercicio.
El
siguiente reportaje explica por qué es importante acertar con la dieta para el
tipo de actividad física que se realice y cuáles son los alimentos recomendados
después de hacer ejercicio.
Cuando
practicamos ejercicio, nuestro organismo quema hidratos de carbono y grasas
para poder producir la energía que requiere el esfuerzo.
También
suda para regular la temperatura corporal, ya que de otro modo subiría al
producirse energía y no se mantendría estable. Lo importante es estar
consciente de la cantidad de energía que pierdes, de acuerdo al tipo de
deporte, para saber cómo reponer de modo eficiente la energía perdida.
Si
realizas ejercicios aeróbicos (son todos aquellos que implican aumentar la resistencia física de acuerdo con el
tiempo con el que se realiza el ejercicio: maratones, triatlones, natación,
ciclismo etc.), estos son los alimentos
que te favorecen:
En
primer lugar muchísima hidratación.
Se
deben privilegiar las proteínas por encima de los carbohidratos, las carnes son
esenciales.
Los
carbohidratos no deben faltar, pero los del tipo simple o no-complejos como el
arroz, los cereales y el pan integral.
El
huevo aporta minerales, y las frutas potasio que se pierde en gran cantidad con
el ejercicio
Si
realizas ejercicios anaeróbicos (son todos aquellos que implican aumentar la
fuerza), estos son los alimentos que te favorecen:
La
hidratación de nuevo en primer lugar.
Se
deben de igual modo consumir grandes cantidades de proteínas extraídas de
carnes magras y pescado a la plancha.
Los
carbohidratos son esenciales, y se puede hacer una combinación entre complejos
como las pastas, guisos de carnes, guisantes, fríjoles, granos enteros y
hortalizas y los carbohidratos simples como el arroz, los cereales y el pan
integral.
El
huevo, la avena, productos lácteos son infaltables.
Se
debe consumir fibra natural que se pueden conseguir en alimentos como las
verduras, porque ayudan a recuperar el tejido muscular.
No hay comentarios:
Publicar un comentario